Archive for mayo 2013
Sensei Rogelio Casero ya es Daikenshi
Estamos de enhorabuena.
Este mes de marzo de 2013, nuestro querido sensei Rogelio Casero Abellán ha obtenido el grado de Daikenshi.
Rogelio Casero Abellán (Málaga, 1962) comenzó a practicar Shorinji Kempo en 1978 en Granada con el maestro John Merlin King, pionero de esta disciplina en España. En 1983 obtuvo el shodan (1º dan) y tras muchos años de práctica, de enseñanza y de esfuerzos, en 2008 alcanzó el godan (5º dan), grado bukai que ostenta en la actualidad. En Shorinij Kempo, además de los grados técnicos (bukai), existe otra escala paralela de grados de carácter filosófico (grados hokai). Es en esta escala donde Rogelio sensei ha obtenido también el equivalente del 5º dan, denominado en este caso Daikenshi.
Rogelio Casero es el shibucho de la sección Axarquía Branch, en la cual estuvimos integrados como grupo durante años, hasta que nuestra sección se constituyó como tal. Por tanto, nos alegramos doblemente con esta buena noticia porque lo consideramos como algo nuestro. Rogelio sensei es, además de un excelente maestro de Shorinji Kempo, un investigador y experto en las artes marciales en general. Ha publicado varios libros (entre los cuales destacan dos de los pocos que existen en castellano sobre Shorinji Kempo y que han servido como manual de uso diario a multitud de kenshi en nuestro pais) y artículos en revistas especializadas. Además de sus enormes conocimientos y, seguramente por su profesión de docente, se ha especializado en la metodología para la enseñanza de las artes marciales, por lo que es un lujo poder contar con él para que, a través de los cursos y seminarios a los que siempre se presta, nos ayude a desentrañar los entresijos de nuestro complejo arte.
Desde aquí le damos la enhorabuena con todo nuestro cariño.
(Se puede consultar la reseña sobre su obtención del Daikenshi en la página oficial de WSKO [aqui] y sobre su godan [aqui].)
Cambios en nuestro Dojo
Desde finales de 2012 y durante el primer trimestre de 2013, hemos estado realizado trabajos de acondicionamiento en nuestro dojo.
Desde hace años, practicamos en una sala del Estadio de los Juegos Mediterráneos, perteneciente al Patronato Municipal de Deportes (PMD). El pasado año solicitamos y obtuvimos permiso del PMD para acometer trabajos de mejora en la instalación.
El propósito de estos trabajos ha sido doble: Por un lado, hemos buscado una mejora en la comodidad y en las condiciones técnicas para nuestro entrenamiento y por otro, hemos tratado de conseguir una estética más agradable y, sobre todo, acorde con nuestra actividad, en la línea de un dojo tradicional. Esta estética repercute positivamente en la concentración y en la actitud durante la práctica.
Todos los trabajos los hemos realizado nosotros mismos, siguiendo la tradición del samu, uno de los aspectos diferenciadores de nuestro arte y que se refiere tanto a la limpieza del lugar de entrenamiento como a todo tipo de trabajos de mantenimiento o de gestión en beneficio del grupo:
La razón del «samu» procede del origen monacal y no comercial de la práctica del Shorinji Kempo, así como de su vocación formativa. En sus orígenes vinculados con Shaolin, la limpieza y otros trabajos eran llevados a cabo por los propios monjes, evidenciando un modelo claro de autogestión. Por otra parte, muchos dojos de Shorinji Kempo son gestionados por los propios kenshi, que carentes de afán de lucro y, a menudo, con una modesta economía, se ocupan de la limpieza y de cualquier trabajo de mejora en las instalaciones. Además, la propia filosofía de esta disciplina (en la que se insiste en el desarrollo de la responsabilidad personal de cada uno) pone de manifiesto el valor formativo de esta práctica, en la que todos -instructor incluido- dejan de lado su rango y su orgullo personal para hacerse cargo de algo que les concierne a todos directamente, esto es: la higiene.
(Extraído de la obra del sensei Rogelio Casero Abellán
«Shorinji Kempo: El Legado de los Monjes Guerreros de Shaolin«)
- Hemos pintado las paredes de la sala
- Completamos el tatami, de forma que ahora ocupa todo el suelo. Para ello, además de colocar planchas que nos ha facilitado el PMD, hemos tenido que adquirir y recortar piezas específicas para completar espacios alrededor de los pilares y en los bordes. Aprovechamos la ocasión para levantar todo el tatami, limpiar a fondo y recolocarlo de la mejor manera posible.
- Adquirimos, adaptamos e instalamos estanterías para colocar nuestro material de entrenamiento. Por un lado, para protecciones (petos y cascos) y por otro para las libretas, toallas, botellas, etc. de forma que se mantenga el orden durante toda la práctica.
- Encargamos y colocamos una serie de elementos decorativos relacionados con nuestro arte: En primer lugar, y previa autorización de WSKO, un soen (el símbolo oficial del Shorinji Kempo) de 1m² que preside la sala. Asimismo, láminas en material sintético con inscripciones en kanji: Dos con el nombre «Shorinji Kempo», otras dos con las primeras características del arte (Ken Zen Ichi Nyo y Riki Ai Funi) y otra con la esencia del arte («Aprender a vivir mitad para uno mismo y mitad para los demás«). Por último, una fotografía enmarcada de la estatua del fundador que se encuentra en la entrada del Hombu Dojo.
- Hemos fabricado e instalado un armero/expositor para guardar los bo (palos largos que nos sirven para entrenar técnicas de shakujo)
- Colocamos y fijamos esterillas formando un pasillo desde la entrada para pasar sobre el tatami sin dañarlo hacia la zona donde nos cambiamos. También trasladamos a esa zona las perchas que antes había en la sala y un equipo de música que se encontraba anclado en la pared a una altura donde suponía un peligroso obstáculo, con su correspondiente instalación.
- Aprovechamos una puerta inutilizada de la sala, transformándola en pizarra para apoyar las explicaciones teóricas.
En los trabajos han participado todos los kenshi de la sección, cada uno aportando sus recursos y habilidades en la medida de sus posibilidades, pero con la misma disposición, sin importar la edad ni el grado. A través de la ejecución de las tareas, no sólo hemos conseguido el objetivo que nos habíamos planteado, sino que nos ha servido para reforzar los lazos de amistad entre nosotros y para avanzar un pequeño paso más en la comprensión de las enseñanzas de nuestro arte.